viernes, 1 de marzo de 2013

Miremos qué pasa con la literatura infantil en la escuela.




DESARROLLO Y PROMOCIÓN DE LA LITERATURA INFANTIL EN LA ESCUELA
(Informe)

El presente informe pretende describir las condiciones actuales en que se encuentra  la literatura infantil en Colombia, teniendo como punto de partida los establecimientos educativos  de la ciudad de Montería, y tiene como finalidad identificar esta problemática educativa para realizar una posible intervención que contribuya al fomento de la literatura infantil en las escuelas Cordobesas.
Par obtener una panorámica sobre la situación en que se encuentra la enseñanza de la literatura en el plantel educativo, se escogió como muestra poblacional los grados tercero A y B en la jornada de la tarde de una institución educativa de Montería, en donde se constató que actualmente no existe un plan de área en donde se incluya la literatura infantil, por el momento se encuentra en desarrollo un proyecto lector que está encaminado a superar las deficiencias de lecto-escritura dentro de la institución,  donde se ha evidenciado que el 25% de la población no lee fluidamente, el cual cobija  desde los grados tercero hasta el grado noveno, no obstante aunque dentro de este proyecto se incluyen lecturas infantiles estas son utilizadas para superar estas deficiencias, pues no existe una conciencia clara de lo que es una literatura infantil dentro de la escuela. Dicho proyecto lector cumple con los estándares básicos.
Ahora bien  en cuanto al desarrollo y promoción de textos infantiles dentro del aula el docente no trabaja con autores y específicos, utiliza lecturas guías las cuales en su mayoría son extraídas  del libro “abra palabra”  de la editorial educar del grado tercero.  Dentro  de estas lecturas se trabaja el nivel literal y el nivel inferencial en aras de fortalecer  el nivel propositivo en los alumnos el cual será fundamental para los alumnos al momento de afrontar el grado siguiente, por tanto los géneros trabajados por el docente son el narrativo donde se abordan, mitos, leyendas, fabulas y cuentos, dentro del género lirico hasta el momento han trabajado poemas de Rafael Pombo y en el dramático han trabajado diálogos,  todas estas lecturas se evalúan de la misma forma, es decir  tipos de preguntas con múltiples respuestas. Cabe aclarar que este  tipo de evaluación está encaminada a satisfacer las exigencias propuestas por el M.E.N. que consiste en obtener un puntaje significativo en las pruebas saber. El docente debe utilizar en la mayoría el recurso del internet para desarrollar las clases de literatura, ya que los textos que posee la biblioteca de la institución son muy antiguos, los cuales versan desde el 1984 y 1995, por tanto teniendo en cuenta estas indagaciones  no se dan espacios para la reflexión y la crítica, o mesas redondas donde el niño exprese su punto de vista, debido a  que no hay tiempo o disponibilidad por parte de las directivas del colegio cuyo objetivo principal es el de  entrenar al niño para las pruebas propuestas por el M.E.N. En cuanto a las actualizaciones que reciben los docentes por parte de las directivas de la  institución, no se evidencia un apoyo por parte de estas. En  consecuencia La directiva sostiene que no existe ningún programa institucional, del cual reciba apoyo para incentivar este tipo de literatura,  por tanto es poco o nada lo que hace al respecto. Toda esta problemática se evidenció al momento de indagar en los niños sobre las concepciones que estos tenían al respecto, quienes argumentaron que el docente les lleva  textos de los cuales resuelven preguntas dando cuenta del carácter formal de texto, la mayoría de las veces trabajan con fotocopias , ya que no cuentan con libros de trabajo, por  ende ellos se mostraron interesados en desarrollar actividades donde se promueva la creatividad, y se les deje participar libremente, al menos en la escogencia de las lectura, pues estas en su mayoría son impuestas. Estas manifestaciones de entusiasmo, permitieron que el grupo tuviera una visión clara del tipo de lecturas que podían funcionar al momento de incentivar la literatura infantil en el aula de clases para que dicha intermisión fuera efectiva. 

Antes de entrar en materia en cuando al Durante de la intervención, es preciso describir las actividades que se aplicaron. Fueron tres principalmente, las cuales se acompañaron de otras que requerían de habilidades para declamar, como fue en principio, como abrebocas, cantar la canción A mi burro, la cual fue acompañada  de su melodías para que los niños pudieran llevar el ritmo; también se llevó el poema Sapito Sapón de Nicolás Guillén con propósito de motivar  de que los infantes lo interpretaran y disfrutaran del poema, al igual que, se les pidió que leyeran de manera rápida y elocuente una retahíla. Actividades en las  que muchos de los niños participaron con interés.
Las tres actividades principales consistieron, en primer lugar, una compresión de una fábula (La Zorra y el León) a partir de la cual debían responder unos interrogantes sencillos; en segundo lugar, una actividad denominada construcción de coplas, a través de ella los estudiantes debían construir coplas parecidas a las presentadas; y por último, la actividad de ordenación llamada Descifrar el cuento, en la que se les pidió que identificaran una vocal “perdida” y la ubicaran en la palabra correspondiente.
Ahora bien, Durante la intervención se pudieron evidenciar ciertos aspectos tanto positivos como negativos. Por un lado, los niños del grado 3° en su mayoría estuvieron dispuestos y motivados para realizar las actividades, pero fueron más efusivos con las que no eran escritas. La gran mayoría de forma voluntaria se ofreció para cantar la canción mencionada, para leer el poema de manera individual y en grupos, así como para realizar la lectura de la retahíla. En cambio, para las actividades que necesitaban concentración y comprensión prácticamente no fueron desarrolladas. Los niños de modo frecuente y muy a pesar de las explicaciones que se les brindaron para que llevaran a cabo dichas actividades, éstos no lograron asimilarlas y optaron por dejarlas a medias y otros sencillamente no las hicieron. Lo que deja muchas dudas sobre la gestión de proyecto lector al que tanto hacen mención las directivas y docentes  de la institución y por el cual se está, descuidando aspectos importantes como el desarrollo de la literatura infantil en estos grados.
En lo referente al Después de la intervención, son un poco desalentadores los resultados obtenidos. Primero, porque realmente se pudo constatar que no se trabaja la literatura infantil y que en las pocas clases de literatura general los estudiantes afirman que no son novedosas y mucho menos divertidas sin contar con el hecho de que tampoco se están cumpliendo los objetivos que persigue el plantel en cuanto a las pruebas. Por otro lado  que no tienen el tiempo ni el espacio para hacer actividades diferentes a los dictados, que es lo que están acostumbrados a hacer  con mucha frecuencia.
En términos generales los estudiantes presentaron básicamente los siguientes problemas:
1) No lograron satisfactoriamente la comprensión de una lectura para poder resolver ciertas preguntas relacionadas con la misma. De hecho, tampoco fueron capaces de crear, a partir de la lectura, un final diferente.
2) Los niños evidenciaron un nivel bajo en la escritura o lo que se alcanzó a percibir fue un poco de desgano para practicarla.
A manera de conclusión se puede decir que la experiencia en la Institución Educativa La Ribera no ha sido completamente satisfactoria en muchos aspectos. Si bien es cierto que tanto el profesor como los alumnos del grado intervenido, tienen la disposición  y la voluntad para desarrollar por medio de estrategias más novedosas la literatura infantil, es innegable que existen ataduras que no permiten que ese ideal planteado se alcance. Para el docente, por ejemplo, le es dificultoso  implementar estrategias diferentes porque no tiene apoyo de los padres de familias y tampoco de las directivas. Además de esto, no cuenta con los materiales ni libros para promover la literatura. En este sentido, para los niños las clases de literatura son en su mayoría un espacio para los dictados y para lecturas que por lo general contienen preguntas de tipo Icfes, pues a los niños se les prepara para estas pruebas.
En cuando a las actividades realizadas en el grado 3° cabe decir que fueron llamativas y novedosas para los estudiantes, quienes se mostraron muy felices con aquellas en las que se les daba a ellos la mayor participación, sobre todo en las que tenían que ver con declamación y el canto fue altamente motivante observar el entusiasmo con que estos estudiantes reciben una clase innovadora e importante como la literatura infantil lo que nos deja claro que hay un futuro promisorio para este tipo de cátedra en la escuela. Por todo lo anterior, fue para nosotras una experiencia muy enriquecedora, además que consideramos fue un valioso aporte para la institución pues dejamos sembrada una semilla de actividades que se pueden realizar con el fin de promover la literatura infantil y que tengan en cuenta que lo más importante es disfrutar de la literatura más en su sentido estético que en el de educar.

Actividad realizada por: Leidis Sofía Peñata Doria y La Sandía Más Fresca